XI Rali Cidade de Lugo

Como os hemos comentado en nuestra página de Facebook, el viernes 16 de Mayo arrancamos en nuestro Talbot Solara SX para, como cada año, echar una mano el sábado en el rali de Lugo de clásicos

Después de haber participado en las primeras ediciones, en los últimos años, debido a que tenemos nuestro precioso Alfa Romeo Giulia Bertone en el dique seco esperando tiempos mejores, nunca hemos dudado en acudir a ayudar en lo posible y pasar un excelente día.

Tal como indica el título de esta entrada, esta cita ya va por su XI edición. Y ojalá que sean muchísimas más, porque esta gente se lo merece. Este año estaba organizado en colaboración entre la Asociación Lucense de Automóviles Antiguos y la Escudería Centollo, uniendo así dos provincias (Lugo y Coruña) en la realización de un evento. Con ello, se hizo un evento doble, organizando los primeros una ruta turística, encargándose los segundos de rali de regularidad.

Este año nos tocó el evento de ruta turística, ayudando en lo que hiciera falta en el parque cerrado y yendo luego de coche escoba. Después de una buena cena y un poco de la noche lucense en compañía de otros “chatarrillas”, el sábado 17 a las 8:30 ya estábamos listos en el parque cerrado del que partiría la ruta turística (los participantes en regularidad partían de otro lado de Lugo). Se contó con 51 participantes en ruta turística y 44 en regularidad.

En la foto podéis ver nuestro Solara, el 911 SC 2.7 de nuestro buen amigo Alberto, con  el que fuimos de coche escoba, y el MG B que ofició de coche 0. Tres coches bastante diferentes con un gran punto en común, la pasión de sus dueños por los clásicos y el buen ambiente alrededor de ellos. Detalle que resume muy bien el nombre de la tienda que oficia de fondo, “Dulce Locura”.

Después de un buen desayuno comenzamos a dar la bienvenida a los participantes, ayudando a aparcar los vehículos en orden para deleite de la gente que pudiera pasar. Todos los participantes estaban invitados, por cortesía de la organización, a unos piscolabis como desayuno, antes de salir hacia una bonita y bien organizada ruta de unos 100 km, con un claro rutómetro con varias preguntas, algunas bien rebuscadas, para hacer más amena la ruta y optar luego a algunos premios.

La galería que os dejamos al final es de la salida (cada minuto) de los participantes en ruta turística. En ella podéis ver en algunas fotos, agachado junto al coche que iba a salir, a nuestro gran amigo Rubén Abelaira, sin el que los clásicos en Lugo no serían lo mismo.

A media mañana se disponía de un descanso de 20 minutos delante de la bonita Iglesia de Vialabade, donde la organización tenía a disposición de los participantes toda una serie de bebidas, pinchos y tentempiés. De ahí la ruta continuaba hasta el bello y perfectamente conservado Castro de Viladonga, donde había tiempo para visitarlo, así como su museo etnográfico.Tras ello la ruta volvía a Lugo, al punto de partida, donde también acababan recorrido los participantes en regularidad, configurando con ello un increíble aparcamiento de un centenar de variados clásicos, del que pudieron disfrutar todos los viandantes que aprovechaban del gran día que hizo.

Tras una comida en el Hotel Méndez-Núñez y la entrega de premios y recuerdos, había preparada una prueba de habilidad para los participantes que deseasen participar (incluidos nosotros, je, je). Ya acabado, todos los que colaborábamos en la organización nos tomamos unos refrescos, hablando de cómo fue el día, de anécdotas “clásicas”, antes de recoger, tras haber quedado satisfechos de tan buen evento y que todo haya salido bien.

Desde aquí queremos dar las gracias a todos los que hacen posible que este evento se siga celebrando con el buen rollo con el que se realiza. Y que todo vaya a mejor (aunque ya es difícil mejorar lo que raya en la perfección). Amigos, hasta el año que viene, ahí estaremos como un clavo.

Ahora, como os prometimos, os dejamos con una amplia galería de imágenes de la salida de algunos de los participantes en ruta turística.